Día a día nos encontramos con un sinfín de contratiempos, de personas, de situaciones, de sonidos, olores, colores, imágenes, sonrisas, emociones, entre otros...
Sin embargo...¿cuánto tiempo dedicamos a atender a los estímulos que nos rodean? probablemente nada o muy poco. Si bien es cierto que fruto de la globalización y de medios como el presente el ser humano se ha sobresaturado de información, pareciera que estamos perdiendo el contacto; ese cable a tierra que nos hace verdaderamente humanos. La capacidad de mirar en el otro a un semejante y animarnos a compartir con él algo más que un instante.
El presente blog pretende recabar experiencias de quienes se dedican a coleccionar experiencias.
¡Bienvenidos!